Concepto para la Corte Constitucional sobre la identidad de género no binario

“¿Deberían las cédulas de ciudadanía incluir sexo o género? ¿Qué opciones de respuesta deberían incluir?” Estas fueron algunas de las preguntas que integrantes del CiderX, junto a profesores y estudiantes de la Maestría en Género y del Departamento de Lenguas y Cultura de la Universidad de los Andes, abordaron en el concepto técnico que emitieron a la Corte Constitucional.

Este se realizó luego de que la Corte invitara a diferentes grupos, organizaciones (LGBTI+) e instituciones, a compartir su perspectiva y a contribuir con alternativas que permitieran resolver el caso sobre la tutela T-8292437.

Esta tutela se presentó ante la Registraduría Nacional del Estado Civil y la Notaría Novena de Medellín luego de que la persona demandante fuera víctima en múltiples ocasiones de la trasgresión de sus derechos y de discriminaciones por no pertenecer al sistema binario (hombre/masculino, mujer/femenino) tradicional. Para garantizar su seguridad y la de las personas cuyos cuerpos “están por fuera de ese paradigma”, y que, por ende, ante los ojos de la sociedad se convierten en “inviables” e “inadmisibles”, solicitó la eliminación del componente de sexo en su documento de identidad o, en su defecto, la incorporación de una nueva categoría, como “indeterminado” o “X”. De esta manera, con la inclusión de un “sexo neutro” o del género no “binario”, no solo pretende la representación de las personas que comparten identidades de género o binarias, sino la disminución de las afectaciones negativas y violentas a las que son sometidas, así como la protección de sus derechos fundamentales, como la dignidad humana, el libre desarrollo de la personalidad y la libertad de conciencia.

Así pues, con la intención de reconocer las diferentes identidades de género existentes en Colombia y “avanzar hacia la disminución de la relevancia del género como fuente de desigualdad y subordinación”, el concepto propuesto por el CiderX hace énfasis sobre la necesidad de incorporar diferentes alternativas para proteger los derechos fundamentales de las personas que se identifican como no binarias, intersex o trans. En ese sentido, después de analizar las diferentes ventajas y limitaciones que la modificación de los documentos de identidad tendría con estas dos opciones, abogan, como primera instancia, por la eliminación progresiva del marcador de género en los documentos de identidad. Si esta alternativa no fuera viable a corto plazo, consideran necesario introducir una tercera opción de género (“X”), especialmente en los documentos individuales (cédula, pasaporte, entre otros).

No obstante, en el concepto emitido se advierte que, si bien esta modificación es necesaria y relevante, puede ser insuficiente a la hora de proteger a los derechos de las personas con identidades no pertenecientes al sistema binario (hombre/masculino y mujer/femenino) que rige en el país. Esto porque podría ser una fuente de nuevas discriminaciones. Por esta razón, subrayan que, sin importar cuál sea la resolución, esta debe ser acompañada de una solicitud explícita que inste a las instituciones públicas a diseñar medidas —manifestadas por las personas y/o asumidas por instituciones y servidores públicos— para erradicar las discriminaciones y violencia relacionada con la identidad de género. 

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