La malaria y la leishmaniasis cutánea son enfermedades transmitidas por insectos que se presentan año tras año en la ruralidad colombiana. Suelen afectar a poblaciones que habitan, laboran o transitan a través de zonas remotas y disperas del territorio nacional. Las estrategias de salud pública a través de las cuales el estado aborda estas dos enfermedades responden a un paradigma biomédico de la salud, en el cual priman los programas llamados “verticales” por enfocarse en una sola enfermedad a la vez.
Este policy paper presenta argumentos de tipo epidemiológico, político e histórico para abogar por un abordaje integrado —sindémico— de la malaria y la leishmaniasis, en medio de un escenario de (pos)conflicto. Se basa en datos cualitativos recolectados en dos proyectos de investigación relacionados, así como en literatura académica y gris relevante. No sugerimos la fusión de dos programas verticales, sino una integración que resulte en un mejor manejo estatal de la leishmaniasis, jalonado por el de la malaria, desde un entendimiento estructural, territorial y socialmente arraigado de la salud.
